lunes, 29 de marzo de 2010

Una lección de historia reciente francesa

Benoît Pellistrandi, un historiador francés, hispanista, ha publicado un lúcido comentario sobre la situación creada en la derecha francesa tras las últimas elecciones regionales. Es una muy interesante lección de historia política reciente en Francia. Acceder al Artículo de Benoît Pellistrandi

domingo, 14 de marzo de 2010

Tres obras de Franz Werfel



Franz Werfel (Praga, 1890-Beverly Hills, 1945) fue un dramaturgo y novelista austriaco del que nos interesan ahora tres obras, las tres de fuerte calado histórico pero muy diferentes entre sí.
La primera que le hizo famoso, en 1933, cuando vivía ya en Viena, fue Los cuarenta días del Musa Dagh (Madrid, Losada, 2003), obra que llamó la atención sobre el genocidio armenio realizado por los turcos
durante la Gran Guerra. Relata la vida en siete pequeñas aldeas de mayoría armenia en la actual Turquía en 1915, cuando reciben una orden de deportación que equivalía a la aniquilación. Su decisión de resistir les lleva a la montaña Musa Dagh donde aguantan durante cuarenta días hasta llegar a su asombroso final. Es un relato de extraordinaria viveza, épico en muchos de sus elementos, y con un toque de humanidad muy propio de su autor.
Este libro de Werfel, judío, fue muy leído entre sus correligionarios del gueto de Varsovia durante la segunda guerra mundial.
Los otros dos libros datan de ocho años más tarde.
Franz Werfel huyó de Austria a Francia en 1938, con motivo del Anschluss, la incorporación de este territorio al III Reich alemán. Cuando los alemanes invadieron Francia en 1940, mientras buscaba angustiosamente la forma de huir de nuevo, esta vez a América, prometió a la Virgen María en Lourdes escribir un libro sobre la historia del lugar si le ayudaba a escapar. Lograda la huida, cumplió su promesa en los Estados Unidos, en Los Ángeles, un año más tarde, al publicar La canción de Bernadette: historia de las apariciones de la Virgen de Lourdes (Madrid, Palabra, 2006). El libro resulta de lectura apasionante, otra vez Werfel consigue
realizar un retrato de sus personales extraordinariamente humano y gráfico. Enfrentado ahora a una historia de muy difícil narración, este autor judío escribe una de las novelas que mejor retratan la visión de los sobrenatural por los católicos. El retrato de Bernardette Soubirous es especialmente impresionante. Pero el de la propia ciudad de Lourdes y la vida de sus gentes más pobres a mediados del siglo XIX resultan también admirables.
Es curioso cómo este texto de principios de los años cuarenta tiene un carácter que resulta marcadamente actual. Quizá sea por lo que Werfel apunta en el prólogo, cuando relata que el libro no nace solamente de la promesa hecha en 1940 en Lourdes, sino de raíces más antiguas: «El valor para llevar a cabo esta empresa me lo ha dado una promesa mucho más antigua e inconsciente. Ya en los tiempos en que escribía mis primeros versos, me juré que magnificaría siempre y en todas partes, en mis escritos, el mistero divino y la santidad humana, sin hacer caso de la época, que se mantiene alejada, con burla e indiferencia, de los valores esenciales de la vida.»
También en 1941, Werfel publicó Una letra femenina azul pálido (Barcelona, Anagrama, 1998), una novela más corta y de tema bien distinto. Un alto funcionario austriaco, en los años de entreguerras, recibe la visita de una mujer, que será también una oportunidad de salvación. Como entre velos, la obra evoca cuestiones como el sentido y el fin de una vida, el afán de triunfar, el amor, la comodidad, la seguridad, la sinceridad y las apariencias.